Sed de Venganza - La violencia gratuita es cosa buena

Sed de Venganza

Hay cierta clase de películas que parecen predestinadas para la NDM, y "Sed de venganza" es el ejemplo preclaro de ello.

Ahí tenemos a Dwayne "La Roca" Johnson con una docena de líneas de diálogo como mucho (¿para qué hablar si puedes golpear, gruñir e intimidar, todo con el mismo gesto?) en la que es sin duda su mejor "aparición en pantalla" (tampoco se le puede llamar a lo que hace "interpretación"), acompañado de unos villanos (Billy Bob Thornton y Oliver Jackson Cohen) pasados de vueltas tanto en su actuación como en el diseño de sus personajes.

Imagino que es un recurso para que el espectador sobrelleve la parquedad del hiper anabolizado protagonista. No bromeo si os digo que pasan unos veinte minutos desde que aparece The Rock en pantalla hasta que dice su primera frase, que es algo así de impredecible como: - Voy a matarte, hijo de puta.

Me gustó que lo primero (cuando digo lo primero, es lo primero) que hace The Rock cuando sale de la carcel es pegarse una carrerón maratoniano como de 7 horas (sale por la mañana, y se le hace de noche corriendo) en busca de su vehículo (macho-guiño). Ver correr a esa masa musculosa hiper-agarrotada y ortopédica, es algo hipnótico y sublime que amortiza directamente el dinero de la entrada.

El guión es de risa. Ahí va otra; matón clase alfa de metro noventa, al que hasta los gorilas de los mafiosos temen, ciego de ira y deseos vengativos, en realidad es buen tipo que te llama para decirte que se ha cargado a tu padre, y encuentra la verdadera fe con un telepredicador reconvertido que fue uno de los que cometieron el terrible crimen del que The Rock busca vengarse.

Dicho lo malo (que no es malo, sino gracioso), la película realmente ofreció lo que buscábamos. Un thriller de acción "a la vieja usanza", sobrio y sin aspavientos. Ni diálogos forzados, ni recursos estilísticos chachis pero moñas. Eso dejádselo a David Fincher. Aquí encuentras un montaje ágil, y unas secuencias de acción-exhibición con fundamento. Además de la buena labor de Billy Bob T. (objetivamente, lo mejor de la película, y de largo) con un personaje ambiguo y bien construido con sorpresa final.


Los machos (Tania incluída) salieron relativamente satisfechos.